Ministerio de Liberación

Escrito el 08/05/2021
CA Cristo Viene


LA LIBERACIÓN Y EL MINISTERIO DE JESÚS

¿Cuál era el ministerio de Jesús? Dondequiera que Jesús iba, el Señor desplegaba los cuatro aspectos principales de su ministerio:

1. Predicaba

2. Enseñaba

3. Sanaba

4. Echaba fuera demonios

"23Recorría Jesús toda galilea. enseñando en las sinagogas de ellos. predicando el evangelio del Reino y sanando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo. 24Se difundió su fama por toda Siria, y le trajeron todos los que tenían dolencias. los afligidos por diversas enfermedades y tormentos. los endemoniados. lunáticos y paralíticos. y los sanó ". Mateo 4.23.24 "39Y predicaba en las sinagogas de ellos en toda Galilea. y echaba fuera los demonios". Marcos 1.39

¿Por qué un creyente necesita liberación?

Cuando una persona viene a Cristo, tiene un nuevo nacimiento en su espíritu, es hecha una nueva criatura. Pero, su alma (voluntad, emociones y mente) queda intacta, en el sentido de que no hay nuevo nacimiento en ella. Por tanto, el alma del creyente necesita ser transformada, renovada y liberada.

 "17De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es: las cosas viejas pasaron; todas son hechas nuevas", 2 Corintios 5.17

La palabra es muy clara, somos una nueva criatura. Eso significa que en nuestro espíritu, somos nuevos, somos libres, somos santos, somos justificados; pero como lo mencionamos anteriormente, hay otra parte de nuestro ser llamada alma, que necesita ser liberada, sanada y transformada.

"2No os conforméis a este mundo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál es la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta". Romanos 2.1, 2

En el alma, es donde los creyentes tienen heridas, ataduras, falta de perdón, sentimientos de rechazo y baja autoestima. Es de todo esto que necesitan ser liberados y sanados.

"7Ciertamente la opresión hace enloquecer al sabio, y las dádivas corrompen el corazón". Eclesiastés 7. 7

Cuando hay un demonio influenciando a las personas, no las deja pensar, ya que las oprime con enfermedades y con depresión; por eso, es necesario ministrarles liberación primero, para que ellas puedan recibir la palabra en su corazón.